La suerte, el ganador, la familia, los amigos, todos son los grandes protagonistas de la Lotería Nacional, y sus distintos juegos, pero este año, entre los anuncios de la Lotería de Navidad se ha colado uno de los grandes olvidados, a pesar de ser una pieza fundamental en este tablero: el lotero o lotera.
Y es que entre los spots que componen la campaña “El bar de Antonio”, y que tanto juego han dado en los últimos días, aparecen, como suele ser habitual, parejas, familias, grupos de amigos y así hasta cubrir un total de 9 piezas. Para una de ellas se ha dejado todo el protagonismo a la propietaria de una administración de Loterías, o como se suelen denominar coloquialmente, una lotera. De este modo, SELAE homenajea la labor callada, diaria, año tras año, de todos aquellos profesionales que atienden, desde el otro lado de un mostrador a los millones de clientes de los distintos juegos de apuestas de Loterías y Apuestas del Estado.
En definitiva, se trata de un reconocimiento público y notorio de lo que significa la profesión de “lotero”: atender amablemente a los jugadores de loterías, transmitirles los valores de Loterías y Apuestas del Estado, entre los que se cuentan la ilusión, la esperanza y los buenos sentimientos, retenerles como clientes y fidelizarles a medio y largo plazo. De algún modo, y aunque a los loteros tengan a diario el pequeño premio de ver felices a sus clientes cuando reciben un premio, este año, todos han ganado ya el mayor premio que les podía traer la Navidad.